El aval bancario no es más que una garantía que funciona como un seguro en el caso de que llegue a ser necesario responder por la persona a la que se avala. Concretamente, esta figura tiene el papel de hacerse cargo de los pagos en el caso de que la persona a la que avala no pueda efectuarlos.
En el caso particular del aval bancario, es el banco el que actuará como avalista de la persona que pide un préstamo a cambio de una cuota que funciona como un seguro de pagos. En estos casos los clientes pagan ese aval bancario para poder cubrir cualquier impago que surja en el futuro.
Tipos de avales bancarios
Aval bancario técnico
En este tipo de avales la entidad financiera responde del incumplimiento del compromiso de pago que tiene el cliente avalado, que generalmente suele ser con organismos públicos, cuotas de alquiler, subastas, concursos… etc.
Es decir, un aval técnico garantiza la capacidad técnica del avalado para hacer frente a sus obligaciones contractuales.
Avales bancarios económicos
Con los avales económicos la entidad financiera avala al cliente en operaciones en las que éste está obligado a pagar una cantidad determinada en un plazo que ha sido previamente fijado. En este caso el aval puede ser comercial o financiero. En los comerciales la entidad financiera avala el pago de cantidades dinerarias derivadas de operaciones de naturaleza comercial como la compraventa de vienes o los pagos a cuenta. En el caso de los avales financieros, los bancos garantizan los pagos de operaciones de préstamo o crédito de las que el cliente es deudor frente a otras entidades financieras.
¿Por qué necesito un aval bancario?
Estas figuras se exigen cada vez más en contratos de alquiler, dada la situación económica que ha vivido España en los últimos años de crisis, especialmente con el tema de alquileres y desahucios. Estos avales han empezado a exigirse ante la demanda de propietarios y bajo la dirección de los bancos.
Para los clientes avalados, disponer de un documento de aval les permitirá cumplir con las exigencias del beneficiario, que derivarán de una relación comercial (contrato de compraventa de bienes, ejecución o licitación de obras, etc.).
Para que un banco entregue un aval, será necesario que el cliente formalice ante notario una Póliza de Cobertura de Garantía Bancaria o una Póliza de Cobertura para Límite de Garantías Bancarias si se van a formalizar varios avales. En esta se regulan las relaciones entre el banco y el avalado, derivadas de la garantía bancaria prestada (pago de las comisiones, intereses y gastos estipulados, reembolso de las cantidades que el Banco haya pagado como consecuencia de la garantía, etc.).
Los avales más frecuentes son los bancarios exigidos para acceder a alquileres de vivienda. En estos el arrendador solicita al arrendatario que cuente con el aval correspondiente a un número de mensualidades a establecer, para así asegurarse que este paga en caso de que no lo haga el arrendatario.
¿Qué es un preaval?
En el caso de la figura de los preavales, los bancos garantizan que si ocurren una serie de circunstancia, emitirán un aval a favor del beneficiario. Suelen darse para participar en los concursos públicos y evitar que los adjudicatarios finales se queden sin aval.
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